Artritis reumatoide y sueño.Cómo no dormir afecta a los pacientes con AR

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Por equilibrar el 18 marzo 2021

Todos los años, el viernes anterior al equinoccio de primavera se celebra el Día Mundial del Sueño cuyo objetivo es hacer hincapié en las causas y síntomas de la falta de sueño, un problema que, a medio y largo plazo, puede acabar ocasionando serios problemas de salud. La situación que estamos viviendo con la pandemia provocada por la COVID-19, sin duda está influyendo de forma generalizada en la calidad de nuestro sueño: el estrés, la incertidumbre, la ansiedad, la falta de vida social… hacen que durmamos menos y peor. En el caso de los pacientes diagnosticados de artritis reumatoide, los trastornos del sueño1 pueden estar motivados directamente por el dolor y las molestias de la enfermedad, o también por factores psicológicos relacionados con ella.

Dolor crónico en artritis reumatoide y trastornos del sueño

La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune que causa dolor, inflamación, rigidez y pérdida de la función de las articulaciones. Ese dolor crónico dificulta en muchos casos la conciliación del sueño o hace que el sueño no sea todo lo reparador que debiera ya que los estímulos dolorosos sobre los músculos interfieren en su desarrollo normal. Hay estudios sobre dolor y sueño en enfermedades reumáticas2 que refieren una alta prevalencia de insomnio.

Por otro lado, la alteración del sueño en pacientes con artritis reumatoide puede agravar los síntomas de la enfermedad3, -dolores musculoesqueléticos, fatiga y rigidez- generando una retroalimentación entre dolor y trastorno del sueño. Un dolor intenso durante el día altera el sueño nocturno y esto hace que el dolor sea más intenso al día siguiente. Esto explica por qué la fatiga es el síntoma más recurrente en los pacientes con artritis reumatoide2.

Cómo abordar los trastornos del sueño en la artritis reumatoide

Las estadísticas muestran que hasta el 60% de las personas con artritis experimentan dolor durante la noche4. A pesar de ello, el sueño no se suele abordar como una preocupación de tratamiento importante.

Dada la estrecha relación entre trastornos del sueño y la artritis reumatoide, un correcto abordaje diagnóstico y terapéutico debe tenerse en cuenta. Por eso, además de un tratamiento adecuado que controle el avance de la enfermedad y minimice los síntomas, el apoyo psicológico se convierte en una herramienta prácticamente necesaria5 cuando aparecen cuadros de ansiedad o depresión.

La colaboración con el psicólogo5, supone ventajas tanto para el reumatólogo como para el paciente. A ti como reumatólogo, puede ayudarte a establecer y comunicar el diagnóstico. Al paciente, ayudándole en el manejo de la enfermedad y sus consecuencias, disminuyendo el dolor y mejorando así su calidad de vida global.

El paciente debería de poder alcanzar el equilibrio en su día a día, a pesar de convivir con su enfermedad.

Si quieres ampliar información, te dejamos otro estudio sobre Calidad del sueño en pacientes con AR6.

Referencias

REFERENCIAS:
  1. El sueño y la artritis reumatoide. [Internet] Disponible en: https://espanol.arthritis.org/espanol/la-artritis/enfermedades-relacionadas/insomnio-trastornos-sueno/sueno-ar/ (fecha de último acceso: marzo 2021).
  2. A. M. Drewes. Rheumatology Volume 38, Issue 11, November 1999, Pages 1035–1038.Pain and sleep disturbances with special reference to fibromyalgia and rheumatoid arthritis . Oxford Academy.
  3. R. Cáliz Cáliz. vol. 17. Num.2, pag.113-115 (julio 2005). Enfermedades reumáticas y alteraciones del sueño. ELSEVIER.
  4. Gail C Davis. Review Holist Nurs Pract. May-Jun 2003;17(3):128-35. Improved sleep may reduce arthritis pain. Pubmed.gov.
  5. La psicología en reumatología. [Internet] Disponible en: Sleep Quality in Rheumatoid Arthritis: Relationship Between the Disease Severity, Depression, Functional Status and the Quality of Life (fecha de último acceso: marzo 2021).
  6. Sariyildiz MA, et al. Sleep Quality in Rheumatoid Arthritis: Relationship Between the Disease Severity, Depression, Functional Status and the Quality of Life. J Clin Med Res. 2014; 6(1): 44-52.
  7. ES-RA-GLPG-202103-00028

ES-RA-GLPG-202103-0002

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